El Cáliz de Lampedusa

Hoy no vamos a hablar de ornamentos abigarrados ni materiales costosos. A menudo como orfebres, estamos acostumbrados a trabajar profusamente los materiales para embellecer, dignificar y solemnizar el culto mediante los objetos litúrgicos. Sin embargo, curiosamente, hace unas semanas y tras un largo recorrido llegaba a nuestras manos una pieza singular, un extraño cáliz en el que no encontrábamos gracia ni técnica especial. Simple, desprovisto de ornato, aparentemente incompleto y realizado con materiales muy pobres, el cáliz debía ser acondicionado para su uso litúrgico.

En ocasiones, la importancia de una pieza no radica en la riqueza de su ornamento ni en la originalidad de sus formas sino en el simbolismo del material que se ha utilizado para su elaboración. El carpintero que la realizó, pretendió centrar toda su simbología en su sencillez y pobreza, reflejo del material que empleó. Es simple, carente de ornato, aparentemente incompleto y realizado con materiales muy pobres, pero no deja de ser un cáliz, uno de los elementos fundamentales de nuestra litúrgia.

Esta copa nos recuerda -como dice el carpintero- el sufrimiento de tantos, en un buen ejercicio de reflexión ante un elemento que simboliza el sacrificio de Cristo. Si el momento de la consagración encierra un sentido simbólico profundísimo para un cristiano, que el continente de ese misterio sea a su vez reflejo de sufrimiento y sacrificio, ayuda sin duda a dar sentido a esta pieza.

Por nuestra parte, tan sólo hemos colaborado a complementar la copa con los elementos necesarios para que todo esto tenga sentido sobre un altar, con un pequeño refuerzo en el pie, y la realización de una copa interior para su uso.

Enlace al video explicativo del carpintero de Lampedusa:

http://www.elmundo.es/internacional/2015/06/04/556f1cea22601da15b8b45bd.html

Sello de Piró Orfebres